Acariciar a un gato puede parecer simple, pero es importante saber lo que debes hacer y lo que no para acercarte y tocar a un gato. Acariciar en el lugar incorrecto o utilizar mucha fuerza o velocidad puede alterarlos, haciendo que te muerda o que te arañen. Deja que el gato te del permiso para tocarlo y deja que tenga el control de la interacción. los lugares donde los gatos tienen las glándulas odoríferas son perfectos para acariciarlos. Esparcir su aroma impregna su ambiente con un olor familiar, lo que hace que se sienta a gusto. Saber dónde tocarlo y cuándo alejarte puede ayudar a garantizar un contacto.
Para saber cómo acariciar a un gato te hemos traído estas pautas. Con ellas, no tendrás problema a la hora de demostrar tu amor a tu gatito, sino que al contrario, lo harás muy feliz!
¿Cómo acariciar a tu gato?
Deja que olfatee tu mano.
Empieza acariciando la cabeza.
Si no trata de marcharse ni da signos de agresividad podemos continuar acariciando el lomo hasta la cola y vuelta a empezar.
¿Cuándo nos piden mimos?
Cuando ronronean es un buen momento para empezar una sesión de mimos.
Si se acerca y se roza con nosotros.
Cuando nos da un golpecito con la cabeza significa que quiere que le hagan caso.
¿Qué debes evitar?
No interrumpir al gato cuando está comiendo o aseándose.
Si muestra alguna señal de tensión o agresividad (pelo erizado, movimientos rápidos de cola, gruñidos) es mejor dejarlos.
No acariciarlos a contrapelo, les da repelús.
